Ha pasado mucho tiempo y... pocas cosas desde que no entro por aquí... y creedme que no lo hago porque realmente no tengo tiempo, no porque no quiera escribir y desahogarme un poco.
El verano fue raro, como si no hubiera tenido vacaciones... la idea era descansar en la playita y disfrutar de la peque, y la verdad es que lo hice... pero me sentía extraño... arropado por mi familia pero me faltaba algo a lo que estaba acostumbrado.
Sara no hizo mucho por mejorar esa situación... llamaba para hablar con la peque y poco más, se positivamente que ella no estuvo de fiesta por ahí porque no es de ese tipo de personas que están deseando quedarse solas para desparramar, estuvo comiéndoselo todo en casa, sola, sin nadie, con el silencio como compañía y viendo tranquilamente la tele en el sillón.
Uno de sus problemas creo que es ese, que no exterioriza sus sentimientos y se lo traga todo y claro, cuando estalla, tiembla Roma... y al que esté cerca seguro que le salpica algo.
Tengo muchas pinceladas de recuerdos que he ido teniendo durante estos meses, sensaciones, inquietudes, miedos... pero este próximo viernes vamos los dos a dar el siguiente paso porque creo que después de lo que ha pasado en los últimos meses no hay posibilidad de arreglar la situación y lo mejor es que cada uno siga por su lado aunque con un elemento en común.
¿Ha leido Sara tu blog?
ResponderEliminarNo, no sabe nada de esto. No sé si me gustaría que lo viera, al fin y al cabo esto es una especie de terapia para mi, no quiero que pueda sentirme coaccionado al escribir.
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